A mi hijo I

Hijo estoy mirando la noche
y en ella te veo sonriente
guiando tus suaves pasos
hacia tu madre silente.
Me gustaría entregarte
un mundo de real bondad
lleno de gente amable
donadora de amistad.
Mas al ver la realidad
solo me queda el decirte
que construyas otro mundo
que sea del hoy diferente.
Crearás como gran arquitecto
castillos y monumentos
fuentes con aguas tan puras
cristalinas cual los vientos
Formularás mil problemas
que resolverás callado
pensando que ya eres grande
porque de niño te amaron.
Corre con ansia de triunfo
por los bosques y los prados
pero recuerda y ayuda
a los pobres derrotados.
Ama y entrégate entero
a la vida que ha llegado
porque te tiene sorpresas
que paso a paso irás encontrando.
Si acaso en algún momento
se angustia tu corazón
dale fuerza con recuerdos
de tu madre que te amó.
La vida pasa corriendo
como la noche de un día
nunca llores de nostalgia
que es motivo de alegría.
Hijo mío heme aquí
solo pensando adelante
y cuando tengas mil dudas
no tardaré en contestarte.
Pronuncia lento un poema
o una frase con amor
porque con solo intentarlo
llenarás tu corazón.
Anda siempre hacia delante
mas con profunda ilusión
y con la frente tan alta
orgulloso de mi amor.