Cancion azul

Disculpa, Dios mío: Lo siento en verdad;
pero no me lo puedo callar.
Tengo que gritarlo. Tengo que cantar
de dicha, de gozo, de felicidad.
Hay algo en mi alma como un manantial
de un amor que no puedo parar.
De noche y de día tu imagen está
presente en mis sueños y en mi ociosidad.
No puedo evitarlo. Mi estabilidad
se ha cimbrado de tanta emoción.
No sé si lo entiendes, ni cómo explicar
que estás en mi sangre y en mi corazón.
Estoy trastornado. ¿Qué has hecho de mí?
No hagas caso. No voy a culpar
ni al sol ni a la luna ni voy a exigir
que dejen su brillo y luminosidad?
Si sientes lo mismo ¿qué vamos a hacer?
Dime a qué lo atribuyes. Verás
que estás en problemas, según mi entender
y acaso lo mismo que yo sentirás.
Entonces sabremos que la solución
sólo Dios la conoce y no habrá
ningún torbellino, ningún aluvión
que nos pueda jamás separar.
Heriberto Bravo Bravo SS.CC