LA PRINCESA ENCANTADA

COPYRIGHT 1999-2001 ANTONIO TORRES 

Mujer de la noche que te escondes 

en las sombras al asecho del que 

busca tus favores. Caminas sin 

descanso siempre huyendo, 

escondiéndote de tus enemigos. 

Cada hora un amor falso que suple 

tu necesidad cualquiera que esta sea. 

Mujer de la noche solo tu entiendes 

porque eres así. Escondes tu rostro, 

endureces tu corazón, buscas alivio. 

¿Quién te lo podrá dar? 

¿A quien le vendes placer? 

¿A los que viven alrededor de ti? 

Si vives recluida en ti misma. 

¿Quién te puede comprender? 

El tiempo pasa y un día té 

quedaras sola. Tu vida es como un 

pantano, entre mas te mueves en él 

mas te andes. Mujer de la noche 

aléjate de las calles son una selva, 

un desierto. Las aves de rapiña esperan 

pacientemente ver caer tu cuerpo 

para devorar tu carne. Mujer de la noche 

las sombras te cubren. Deja que la luz té 

Proteja. Alza tus ojos al cielo y busca 

tu libertad en la pasión verdadera. 

En el dominio de tu verdadera vocación. 

Descúbrete mas allá de lo que vives. 

Hay un mar de esperanza donde se puede 

navegar sin naufragar. Donde las tormentas 

no te pueden tirar a la borde. Donde puedes 

alzar tus brazos al cielo y decir: 

“¡Soy Libre!” Y estar luciendo tu verdadero 

atuendo, el de una princesa que sé 

perdió en el camino rumbo a su reino, 

donde su príncipe espera ansioso 

su regreso. 

¡Vuelve a mi amada mía! Vuelve a 

mi regazo. Me olvidare del pasado 

y haré de cuenta que nunca te fuiste.