Quiero amar y tengo miedo

Muy poco gratas han sido las últimas horas vividas en esta Página. Poetas, lectores y Autoridades caminando entre esas dos líneas paralelas que conforman la vida, la de las convenciones que se superan con facilismos, y la segunda, la compleja, la auténtica, la que cuando se aborda nos sumerge en dilemas profundos, dudas, necesidad de enfrentarnos con las revelaciones o misterios que a diario eludimos, para sobrevivir con aparente paz. Pero el destino que siempre nos alcanza, nos enfrenta tarde o temprano a nuestros mas ocultos conflictos y nos obliga al eterno planteo existencial. Y todo nos parece tan relativo, tan sin sustancia. Y el imperio de la verdad se relativiza y la tan mencionada justicia nos recuerda que la imperfección es la ceguera de la señora de la espada. Entonces buscamos paliativos y recordamos a Judas expiando su pecado con la muerte, pero sabemos que tal vez Jesús lo sentó a su mesa para que lo traicionara. La culpa entonces y su castigo, se trastoca en duda y pena, en angustia y hasta dolor. Porque nunca el padecimiento de muchos o pocos podrá alegrar a la mente alejada de apasionamientos. Pese a todo, pese a la incapacidad de los seres humanos de hacer lo mejor, por nuestra propia condicion evolutiva, pese a ello, lo mejor o mas correcto fue concretado y supongo que esa difícil decisión, doblegó la paz espiritual de quienes afrontaron la responsabilidad. Y distante de la mesurada y hasta dolida expresión de muchos, hay un elocuente silencio de muchos más, que extiende su mano a quienes dirigen este Rincón. Y hay también una mano tendida para quienes la necesiten. Esta es mi intuición, mi sentimiento y mi necesidad de trasmitirlo.

Muchas veces envié comentarios a Rincón con críticas que creo fueron constuctivas a poemas o diversos temas de discusión en relación a los mismos. Fuí descalificada, agredida, insultada, se me trató de ser otras personas (inclusive hombres)y como nunca ví que nada se aclarará, ya desistí de enviar mas opiniones, porque me sentí desplazada, y ofendida muchas veces. Hoy veo que es posible volver a escribir y no esperar un insulto de respuesta. Gracias Dany, porque nobleza obliga, hoy demostraste tu enorme valentía y sé,lo intuyo, que tu tanbien, debes estar dolido por todo lo sucedido. Por todo ello, mi aliento y mi aplauso a tu actitud.

La justicia no tiene nombre. Pero finalmente se hizo justicia, mal que le pese a los defensores de lo injusto ( es todo lo que voy a decir, aunque me cuesta contener las ganas de replicar las ofensas que estamos leyendo ahora). YO SOY UN LECTOR MAS QUE FUI TESTIGO DE LA ATROCIDAD COMETIDA Y HOY VEO CON SATISFACCION QUE SE HAYA HECHO JUSTICIA. SI JUSTICIA, Y NO SOY LAI NI NADIE CON MAS INTERES QUE NO SE PERMITA LA IMPUNIDAD QUE EL POBRE KOLO DENUNCIARA Y POR LO QUE FUE AGREDIDO. CREO QUE LA PAGINA DEBERIA PARA QUIEN TIENE DUDAS EXPONER LAS PRUEBAS O PONERLAS AL ALCANZE DE QUIEN DUDA DE LA FALTA COMETIDA. SI CON ELLAS SE SIGUE ARGUMENTANDO MENTIRAS, ENTONCES VOLVER A APLICAR JUSTICIA.

Se que como yo, muchos estarán tentados de responder y no con terminología adecuada a la nueva serie de insultos y agresiones, ademas de una pretendida nueva tergiversación que elabora otra expresión de la enfermedad. Pero lectores, no respondan a la provocación, esa que pretende homologarnos con argumentos remanidos y burdos que siempre utilizó y que resultan cómodos a la hora de la justicia, justicia que la enfermedad asume como derrota y buscará millones de argumentos (siempre los buscó) para no aceptar sus equivocaciones. Dios y la ciencia (porque los comentarios están registrados) son testigos de que se hizo justicia. Lo demas corre por cuenta de extraños intereses y alteraciones inexplicables,

Agradezco profundamente que se haya hecho justicia. Sabe Dios el dolor profundo que produjo en muchísima gente leer insultos usando para ello entre otras cosas a una enfermedad tan dolorosa. Como leí en un comentario de recién, no produce alegría como cuando se gana una competencia o nada parecido, pero sirve para que aprendan a convivir mejor la gente que aún sigue incentivando el malestar. Nadie con sano juicio puede desaprobar lo hecho,porque fué muy grave, gravísima la falta cometida. Una falta no contra una persona, una falta contra millones de seres humanos que luchan por su vida y fueron ofendidos gratuitamente. Y por otro comentario que leí tambien recién, no creo que ningún lector sea quién inculque a la polémica. Ese comentario me parece que si. Bueno Rincón, muchas gracias.