Sin alguna explicación

Sin alguna explicación
Ya tú la sabes como lo he sabido yo
no me pidas que te explique
no me exijas que hoy lo haga yo
Acaso se puede hablar, decir
de lo que se siente con el amor
La vida es un paso momentáneo
que transcurre en un abrir de ojos
entre el sueño y la pasión
El sueño al no haber nacido
la pasión de hacerte el amor
La vida, ésta que vivimos
la que nos hace requerir extensión
es la que nos permite saber
no sólo, donde hay dolor
Es la que nos estimula a querer
a intimar y exigir de otros amor
No insistas, de eso sabes tú como yo
Sí, no te rías, ya sé que aprendiste
no sé si conmigo o con alguien
no tiene importancia
Lo que subyuga, lo real
es amada mujer de mi vida
el que tú me enseñaste a amar
Lo hiciste con ternura, con la paz
con fondo de una canción
Una que hablaba de cosas bellas
de sueños por construir
de un hombre y una mujer
de eso, aquello, de algo
por lo que valdría la pena vivir
Y me amaste con tanta ternura
que me consentiste volar
en un soplo de viento
que se deslizó en el momento
Y llevaste a mi mente a otro rincón
Maravilloso viaje que me permitió
el alcanzar y ver el cielo, la luna
Pude entrar en la casa de Dios
y luego de la experiencia mística
en la que conocí un alma desnuda
fue cuando aprendí la verdad
que vinimos a la vida con una función
con una muy especial, la de amar
Luego creyendo haber llegado al final
sorprendido, permitiste que nadara
en las profundas aguas marinas
y volara por sobre todo el cañón
develando cosas insospechadas
y entre ellas la pura razón
¡Cállate! No me hagas trinar
¡Sabes lo que yo sé y mucho más!
Lo sabes, cuando me besas
cuando acaricias mi estar
cuando bebo de tu boca
los zumos de tu paladar
Lo entiendes por como miras
lo sabes y es porque lo sabes
que yo no te lo puedo explicar
Samuel Akinin Levy