Un lugar, una vida en sueño se manifiesta,
con los míos, con los vuestros hay unidad,
por una sola historia cada año es una fiesta.
En cada corazón nace un niño, en navidad.
Como luz, reina el perdón en las miradas,
se abre el corazón en cada abrazo amigable,
es realmente del Niño las sonrisas regaladas.
El deseo de felicidad es sincero y amable.
En brindis sincero nada se oculta a los amigos,
es momento de unión fraternal e igualdad
pues Dios y el tiempo siempre serán testigos.
Hay perdón cada noche buena y cada navidad.
Felices son mis niños y sea por siempre sueño,
en sus dulces miradas bailan aun los angelitos,
alborozados todos cantamos por mejores años.
El contenido de mi copa está lleno de regalitos.
Autor: Alcibíades Noceda Medina