1.
El Deseo de Dios a Dios no crea.
Si ese Deseo todos lo sentimos
Y jamás se nos calma,
Es porque el mismo Dios
Lo ha puesto en nuestras Almas
Desde el instante mismo en que nacimos.
Las Almas a Dios buscan,
Por la misma razón
Que la Sed busca al Agua:
Porque la necesita.
Y lo que necesario es para la Vida
Necesario es que exista.
Si no existiera,
Qué absurdo, qué cruel y qué arbitrario
Que Dios sería.
Nos habría creado
Sólo, tan sólo
Para martirizarnos. 2.
La Razón ha creado
La Creación.
Y esa Razón Creadora
No es sino el mismo Dios,
Dejando en lo que crea
Su Huella y su Impresión.
Quién mira lo creado,
Está mirando al Dios que lo creó
Y está, al admirarlo,
Admirándole a Dios.
Y sintiéndose amado,
Pues todo Creador
Seguirá siempre amando
Lo que creó.