Escuché que me llamaban,
pero mi nena no está,
se fue a jugar con Mariana,
aunque la puedo llamar.
Ella está muy preocupada,
por el dolor de tu brazo,
ya mismo voy a buscarla,
para que jueguen un rato.
Siempre está muy ocupada,
y ya está un poco cansada,
por eso la dejé salir,
para verla sonreír...
No estés triste ni abandonada,
pronto todo será igual,
y seguirán ilusionadas,
porque volverán a jugar.
Dame tiempo que ya vuelvo,
ahora mismo voy a buscar
a la princesa del cuento,
para que puedas quitar
tu tristeza en un momento.
Elsa Fariña
16/04/04