El ser presente, la vida asume
las alegrias, vive a diario,
amores rotos, su alma consume.
Pasan las cuentas, pavor constante
Y caen sus hojas, del calendario,
que advierte crudo a cada instante.
Que eres del soplo; la oscura arena
y de ella eres, su presidiario,
donde tus tiempos, son la cadena.
Cordón eterno, que a ti te ata,
a lo que piensas; tú y llamas vida
mentira cruel, si al fin te mata.
Piensalo bien, y así sabrás,
que eres oveja, siempre perdida;
pues fuiste polvo:, y a el volverás.
Príncipe azul.
13-1-010