El siete de Agosto será una fecha inolvidable,ya que ese dia perdí un poco de mi alegría,porque lo que más quería se me fué,buscando una mejor vida,una vida que será eterna,donde no existe dolor,donde reina la paz y armonía,donde nos encontramos con Dios y nos sentímos tranquila.
Para mí,fué una tristeza alegre,tristeza porque sabia que ya no podía estar con mi madre,que no podría abrazarla, mirarla y contemplarla como antes yo lo hacia,pero a la vez sentí alegría,al saber que ya ella no sufría por su ingrata enfermedad,que ya ella estaba en el cielo,disfrutando de una santa paz.
Pero me duele no poder estar con ella,no darle los buenos dias,extraño tanto sus besos,las caricias que me hacia,pero no quise ser egoista y aunque me dolía el corazón,pedí a Dios se la llevara,le pedí con gran clemencia,que no la hiciera sufrír más,porque ella era mi mamá y yo prefería su ausencia.
Por eso digo que es una tristeza alegre,esa que siento yo,la extraño,la sueño,la añoro,pero fué lo mejor que pudo pasar,porque sé que fué a una mejor vida,y estoy alegre aunque no la pueda ver
porque sé que ya no sufre,sé que ahora está tranquila,y siente felicidad,y cuando un hijo de verdad quiere a su madre,quizás muchos no comprendan,antes de verla sufrir en agonía,prefieren no verla más,prefieren su vida eterna y que ella descance en paz.