Hay esperas...

Hay esperas en que el cuerpo se resiente
pero otras en las que se cansa el alma
y es allí donde todo se nos pierde
el timón y las velas y el ancla.
Se esfuma de improviso la alegría
se nos llenan las venas de nostalgia
no hay solticio de verano ni de invierno
nos perdemos ya naufraga la esperanza.
Es en esos momentos de desierto
donde todo se vuelve arena vana
y de pronto aparece a lo lejos
un rayito como tromba, él avanza.
Es que Dios siempre nos lleva de la mano
y aunque a veces perdamos el camino
el nos toma en sus brazos amorosos
nos devuelve poco a poco la templanza.
be bj