Amor incesante

Cuando la hallé, fue emoción y alegría,
algo en ella me inspiraba amor,
hasta al corazón llego el estupor,
y mi alma la recibió con algarabía.
Pues soy conciente de la distancia
que nos separa, en todo momento,
la distancia a este sentimiento
no le concierne y le resto importancia. El amor entre los dos es un hecho,
al escuchar su voz hierve mi sangre,
también al oír esas risas alegre,
Su alma pura albergué en mi pecho,
fui y soy feliz desde aquel instante.
Por ella crece el amor y es incesante.