Todos nos aferramos a la vida,
Nadie quiere aceptar otro desafío,
No pensar en el futuro sin forma,
Ante la muerte o la luz del sentido.
La vida debe ser plena sin dudas,
el último momento es cada minuto,
renace como fruta feliz y plena,
el alma no sabe de ningún reducto.
Debemos buscar contactos vivos,
y dar respeto sin medidas frías,
todo cuanto respira tiene derecho,
a florecer en cada obra divina.
Nada permanece inalterable,
El ser se transforma en sus obras,
A cada partícula del universo,
Le llega el momento de ser..
Universo y tiempo viven juntos,
Y el pasado muere, se hace futuro,
Dura un segundo y ya es fecundo,
Hay luz en los rincones maduros.
AUTOR: IVAN CARRASCO AKIYAMA /PSEUDÓNIMO D_Amadore