Mis revoluciones.

Mis revoluciones transforman crisis por paréntesis,

es decir, la proclama se basa en tu cuerpo

y la pausa, en un orgasmo materialmente intachable sentimentalmente...único.

Mis revoluciones están ahí al borde de tu senos,

no tienen prejuicios,

ni tiempos,

ni balaceras intrascendentes,

ni siquiera una moralidad socavada,

por enemigos, transitan y mutan, permanentemente,

cobijan tanto amor como odios vecinos,

y pueden derrocar cualquier atisbo de dictaduras.

Mis revoluciones, amor, te pertenecen,

te descubren entre senderos púrpuras

y cascadas de manantiales puros,

y entonces triunfan con el solo puñado de besos

que en cada barricada humedecen hasta el alma!