¿Por qué he de continuar aquí?
¿Qué espero yo de mi vida?
Con la dicha ya exprimida,
y sin dar ya más de mí.
Me hago esta reflexión,
cada vez con más frecuencia,
y sólo veo deficiencia,
en toda mi relación.
No encuentro respuesta buena,
ni razón para esperar,
pues sé que voy a encontrar,
una de cal y diez de arena.
Es importante saber,
si es designio divino,
precipitar el destino,
sin una razón tener.
Nada de nadie yo espero,
nadie espera de mí nada,
y se me antoja putada,
no hacer lo que yo quiero.
Por consiguiente es hoy,
un buen día para estar,
pero lo de continuar.
ya veremos si me voy.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!