Si me ves a los ojos podrás ver el universo,
y la inmensidad que habitan en mi alma,
y mi voz de lobo penetrará tu aura,
y me verás desnudo bajo tu espalda.
La luz de tu vientre me desgarrará,
y si me ves a los ojos verás el mundo,
y gritaras mi nombre a la distancia,
y sabrás que la vida me arrebatas.
No habrá calma que lea mis sueños,
no tendrás destino en tus mañanas,
beberás el vino que de mi emana,
caminarás descalza sobre mi cama.
Si me ves a los ojos sabrás que soy todo,
que vivo en el edén de tus caderas,
que vuelo en la mar de tus entrañas,
y en el abismo de tu entrepiernas.
Si me ves a los ojos tendrás descanso,
verás el mundo de otra manera,
andarás sola en tu trinchera,
y me verás llorar cuando me muera.
Si me ves a los ojos verás mi vida,
y me dejarás entre la ausencia,
le dirás al tiempo que no se detenga,
y que se lleve consigo toda mi esencia.