No tengas miedo
que a decir verdad somos
tan solo dos amantes,
seres nocturnos
que el devenir nos encuentra,
somos el silencio fuera de
este cuarto de sedas y
espumantes refrigerios,
y ela ademán apasionado
de esos brazos que
se entrelazan.
Sinceramente y en el
tenor solemne de nuestras
vidas paralelas,
somos el gemir de almas
que aman el momento
y luchan por no
separarse, y aman
en contados momentos.
No tengas miedo,
tu nombre no saldrá
de esta habitación
porque el secreto,
tendrá el sabor perfecto
y alucinante, y nuestras
cosas son, el refugio
de palabras que quedarán
sumergidas dentro
de nosotros eternamente.