Mujer de sueños,
mujer, adicta a mi conducta;
mujer de profecìas
en el papel,
acaso no querìas ser mìa?
mujer, postal de frìas mìradas
convertida en chacal
de mil puñaladas,
te volviste en contra mìa,
cuando menos lo entendìa;
mujer que me seguìas
a todo encuentro, y en la noche
cuando la mirada se ocultaba
sangrabas por la herida
por no encontar una salida;
mejer que aùn me llevas
entre tu solo, y fragil
vientre,
apostando quìen sabe a que;
sea mejor mi suerte.
Mujer que no dejaste
de pensar en mì un instante,
abre tu lecho ahora
que està entrando su majestad
a contarte mil verdades
con susurros a tus oidos
para que duermas tranquila.