Nuevamente mirando por la ventana.
Los hijos no llegan, han migrado del hogar,
saben que les echas de menos.
Llueve fuerte, entiende que quiero salir de aquí,
quiero correr a su lado y me lo deja claro.
Hace frío, no sé si ellos lo sienten
pero en mi, cala mis huesos, tiemblo
quisiera correr y llegar hasta su lado,
sentir ese calor que solo llena su cariño.
Hoy sueño despierta, los recuerdos se superponen,
mis ojos quieren verlos, juntos a todos
como cuando estaban niños.
Esas imágenes se repiten una y otra vez.
Las sensaciones acunan tantas emociones,
aquellos sonidos susurran al oído,
mi voz quiere formar palabras,
las palabras que un día dije poco,
y que hoy aquí escribo: los amo con todas mis fuerzas.
Hoy sigo mirando de nuevo por la ventana.
sigue esa sensación, sigue mi espera...
Poeta, desde muy temprano los padres debemos ir tomando conciencia que al crecer los hijos, se irán de nuestro lado, es algo natural dentro del proceso de la vida, lo mismo hacen los animales, por ahí pasan la mayoría de las madres pensando que siempre son sus bebe, animo y palante que así es la vida, a usted y a todos nos toco también dejar nuestros y formar nuestros hogares, aunque duro pero es así, felicitaciones, fraternal saludo-LOPERA