Abrí los ojos otra vez hacia el cielo azul.
Abrí los ojos ante los árboles en flor,
descubrí los colores de la alegría,
descubrí el cantar del arroyo
y las hojas fértiles.
Abrí los ojos en el mar
y las olas me tranquilizaban
y su brisa me besaba despacio.
Estaba sola en ese paraíso
pero estaba contigo,
porque te sentía cerca,
porque tus caricias eran la brisa suave,
porque tu latir eran las olas en despliegue,
tus ojos el amanecer en colores dulces
y tu cuerpo
era yo porque perteneces a mi.
Por eso,
cuando no estoy contigo,
te tengo cerca…..
en mis impulsos de fantasía