En verdad, te he esperado por tanto años,
sé que te hallé tarde. Cosas indecibles
pasaron sobre mí, en verdad; son increíbles.
Nada importa, cansado me veo extraño.
Te esperé en ríos, también en cañadas,
tuve frío, tú en distancia me bañabas.
Mis canas blancas así nadie soñabas,
nada queda de anheladas alboradas.
Al seguirte esperando ya me encorvaba,
caminar ligero mi vida acobardaba.
mis ojos cansados el horizonte exploran
tantos años pasados hoy me imploran.
Al fin llegas; exclama sorprendido el espejo
¿Tarde llegas; yo hecho un pobre viejo…?
Autor: Alcibíades Noceda Medina
No hay duda, usted llegó a viejo escribiendo mal. Por eso ya es tarde para poder corregir sus sonetos. le comprendo Noceda. Saludos cariñosos y que Dios le bendiga. Luis