El frío que suspiras sobre mis dedos
hace que se entuma todo mi cuerpo
y tu mirada estrellada desde el cielo
hace con su incendio cenizas mi tiempo.
Tú me besas con tu suelo casi ya sin flores
estas viviendo ocasos y largas noches
por fin me has desnudado sin contemplaciones;
Veo correr ríos llenos de vida
para desembocar en tu muerte,
te han cambiado tu oasis por un pantano.
En este tiempo que más que mío es tuyo,
los glaciares se despedazan sin tregua,
aguas claras se cubren con petróleo
y tantas criaturas y valles desaparecen del entorno.
Ahora que por fin te veo a la cara me doy cuenta
que jamás fuiste honesta con migo
pues solo me besabas y me hacías reír de niño,
hoy todo lo que tengo y he hecho es tuyo
y sin embargo me da vergüenza decir que te amo
pues no puedo protegerte de todos los humanos.