Hagamos de cuenta

Hagamos de cuenta
Vamos a hacer de cuenta que aún estoy vivo
y que esta pena en mi alma aún es sincera,
porque floreció lágrima como fruto de dolor.
Vamos a hacer de cuenta que áun soy tu cautivo
y que este desordenado respiro ya no tiene una manera,
pues todavía se altera al sentir en el aire tu olor.
Vamos a hacer de cuenta que aún de tarde te siento,
como en las noches mis manos te buscan con ansias,
porque cada ojo mio ciego sólo ya pozo del deseo.
Vamos a hacer de cuenta que ya eres viento
y que en este hondo respiro encarcelé tu fragancia,
como mis dedos lo hicieron ya con tu pélvico meneo.
Hagamos de cuenta que nunca te has ido,
que estas letras jamás fueron escritas
y que esta pena, lágrimas, silencio, esperas,
como tontas ovejas en el camino perdido,
aún andan buscando del descuido las grietas.