Aquellas amigas

Contadas con los dedos de las manos
aquellas que nunca han dicho mañana
y han conjugado un solo y gran verbo
que nos ha mantenido unidas.
De ese verbo hemos aprendido
que nadie y por ningum motivo
se quejara y si soportarà
los defectos,carencias y manìas.
Este verbo, ha sido el soporte
fidelidad y respeto
ese sentimiento que se ganò con esmero
para asegurar el sitial
desde donde hoy nos miramos.
Pero el verbo amar,nunca se conjugò
en primera persona
estaba siempre de màs, el tù y yo
siempre fuìmos nosotras;
sin el deseo de mitigar o aplacar
los anhelos de cada una.
¡Aquellas amigas!
lejanas en aspiraciones y sueños fallidos
nunca enemigas y sì compinches
que reìmos de buenas ganas
compartièndo ante el dolor e ignorancia
con sus cuotas de inseguridades y miedos.
Amigas en la grata compañìa
amigas incansables y leales
son pocas tal vez
pero permanentes en el tiempo
con esa tonelada de alegrias y esperanzas.