Abro la ventana a una verdad.
En un dialogo, dando explicación,
dije: en tu vida estoy por intromisión,
solo por una simple curiosidad.
Que al principio solamente era eso,
conocer a una mujer ajena a mí,
en esa loca ansiedad me sumí,
y desde entonces, de ti estoy preso.
Tristemente, lejos de entenderme,
me dijo, algunas malas palabras,
y también otra cosa que le sobra,
que tal vez por un tiempo le carcome.
Me refería a la diferencia de edad,
en eso se basaba mi real curiosidad.
Autor: Alcibíades Noceda Medina