De que me hablas.
si no tienes el derecho.
me dices que soy intrusa,
y tú te fuiste .
tras quien te desabotono la blusa.
De que te quejas.
jamás te importo.solo fuiste traviesa,
sentías que el mundo movías,
sin pensar que tal vez lo perderías.
De que me acusas.
si alguien es culpable eres tú,
quien abandona el nido.
deja libre el pájaro prohibido.
y si regresara a él, no debe espantarse,
que alguien más de delicias venga a colmarle.
De que te espantas.
si dices tus virtudes, y se tus correrías,
podría enumerarlas.
y me faltarían días!
No hay peor castigo para la lengua larga,
que tener malos pasos al lado,
te descubriría.tenme mucho cuidado..
no hay mas fuerte enemigo.
que quien se siente herido.
Así que olvídate de mi
y no me vuelvas a insistir.
de que yo me olvide de todo.
no lo se.quizás si por ti sintiera pena.
no te daría esta condena.
Pero. . . para pagar tu maldad.
solo basta mi sinceridad!