Eran las cosas del mar.
las que me decían
que me quedará mirando las olas,
que me mojaban los pies de espuma y arena.
Suena mi alma, se escapa el humo por la madrugá. en la orilla del mar.
soñando con peces y pajaros,
los barcos se hacen los dormidos,
no pasa nada aunque te hayas ido,
si es que aquí, hoy da igual, aquí o allí
En la orilla del mar, pensando en colores
enrisas, en pies cada uno a su camino,
cada uno a su destino.
Y que sé yo de la vida y del futuro
Y que sé yo del horizonte y del infinito..
por eso, me vine a fumar, a la orillita del mar.