Busque...
entre las noches y los días;
la canción, llena de ensueño
con dijes de alegría.
Busque, entre las piedras,
Y en el fondo del arroyo;
en la copa de los árboles
donde sea, estaba yo.
El murmullo de las aguas
en monótona canción;
saltando entre las piedras
entristeciendo el corazón.
Busque... en los sueños
una bella realidad;
pero al estar despierto
no era bella, si no amarga.
Busque... busque
la ternura, el amor;
pero la espalda siempre hallaba,
encontré frío, no calor.
Busque...
la gloria allá en el cielo;
qué tan sólo oscuridad
impedían, a mi verlo.
Comprendí tarde
que todo era falso;
qué tal vez un gran abismo
se hallaría en nuestro paso.
Que rugiente en el fondo
un río esperaría;
y sus aguas turbulentas
nos quitarían la vida.