Ma. de los Ángeles, hija adorada

Eres mi mundo, mi cielo, mi muñeca bien amada sin tí, la vida no concibo en mi mente, tan solo unas cuantas horas separadas y ya te extraño inconmensurablemente. Tú, hija mía, lo eres todo para mí, lo más importante, lo más trascendente. A dragones gigantes desafiaría por tí así como a sus lenguas de fuego incandecente. Eres mi sueño mi niña hermosa, a quien, aun sin nacer, yo ya amaba, mi nena bella y preciosa, pues eras TÚ,lo que mi corazón más añoraba. Eres Mariángel, mi motor para seguir luchando Eres mi único amor, mi amor primero, mi amor puro, mi amor sincero, sólo por tí seguiré, contra corriente remando. Amada por todos, eres un sol radiante, inteligente, bondadosa, solidaria y brillante, de la Santísima Virgen amorosa, de fe inquebrantable y hermosa. Muchas noches tu sueño he contemplado tu larga y frondosa cabellera he acariciado eres tú niña linda, mi más caro anhelo quien cual Angelito, bajaste del cielo. Sólo le pido a la vida que jamás te niegue el amor y la felicidad pues tú naciste para ser adorada por todos de mil formas y de múltiples modos. Nunca podría mi amor describir en palabras, sólo te puedo decir que le diste luz a mi vida, sentido a mi destino, compañía a mi soledad, y a toda mi existencia, indescriptible FELICIDAD! P. BRIGETTE FARFAN BENITES Abril 28, 2011