No vuelvas a mí,
no me arranques a jirones el alma,
no me veas como pierdo lentamente la calma,
no te quedes en la puerta trantando de volver.
Decidete ya y vete!...
no me pidas que te olvide facilmente,
que el adiós no me duela amargamente,
solo vete y no vuelvas más la cara.
Sólo deja en mi mente tu recuerdo,
deja en mi alma el sentimiento
de haberte amado intensamente.
Vete ya, y despídete,
que el amor está doliendo tanto
que a mis ojos le brotan llanto,
y que no quiero que me veas sufrir.
Vete con el recuerdo de lo bueno,
con esas tardes de ver ocasos
con tantas noches de amarnos tanto.
Vete en paz con tu conciencia,
que muchas cosas buenas dejas de experiencia,
aunque en mi alma me duele más la ausencia.