Soy feliz siendo un delfin libre_...

Queridos lectores y colegas, hoy voy a intentar escribir un cuento, nunca lo hice, espero que les agrade y como los cuentos pueden llegar a cansar por lo largo, trataré de que la lectura sea llevadera y cada tres o cuatro renglones dejaré un espacio, asi no cansa la vista, quiero aclarar que cuando escribo sobre un perro, delfin gato o cualquier otro animalito, lo hago en primera persona, como si él, contara su propia historia, lo aclaro para que puedan entender el cuento. Atte: Lina

Que lindo día el de hoy, el azul del mar me enamora y las olas me invitan siempre a saltar sobre ellas, es todo un desafío, pero soy tan feliz haciéndolo, cada vez salto más alto, tal vez un día toque las puertas del cielo y Dios me reciba contento al alcanzar tanta destreza, solo para saludarlo.

Qué vén mis ojos! ah! que lindo, es la costa, quiero estar más cerca, voy a nadar para la orilla, no se por qué me gusta estar cerca de los seres humanos, algo de ellos me atrae profundamente, me gusta aunque sea mirarlos desde aqui, ellos se ven contentos cada vez que entran al mar. En eso se parecen mucho a mi, que lindo es verlos jugar y reirse, se ve que son buenos y que su vida es así, como los veo ahora, felices.

Oh! por qué estará gritando esa mujer, parece estar llorando, me voy acercar más, quiero saber que está ocurriendo, miro mucho movimiento de personas en la orilla del agua y estan mirando hacia el mar, será que los asusté con mi presencia que miran hacia aqui; de repente un brazo llama mi atención, está dentro del mar, pero alejado de la costa, no se porque estoy presintiendo que algo malo está ocurriendo, comienzo a nadar lo más rápido que mi cuerpo alcanza y llego enseguida a ese brazo que asomaba del agua, pude ver que era un niño en peligro, pobrecito, inmediatamente le puse mi cuerpo debajo del suyo, asi no se hundía, lo noté asustado.

Pero al verme cerquita de él, dejó de llorar y se quedó tranquilo, traté de ubicar mi aleta debajo de sus manitos y el niño muy inteligente, me entendió que solo buscaba ayudarlo, entonces cuando se tomó de mí, comencé a nadar hacia la orilla, muy cerquita donde se encontraban dos hombres corpulentos, ellos se acercaron a mi y tomaron en sus brazos al niño, desde ahí, alcancé a ver a la señora que lloraba y que ahora estaba riéndo y muy ansiosa mirando a los dos hombres que le llevaban al niño.

Me quedé un ratito más, cerca de esa orilla, quería disfrutar de la alegria de esa mujer y ese niño, de repente veo que el niño agita su bracito y contento me está saludando a mi, entonces me sentí feliz y me sentí útil al poder ayudar a esos humanos que tanto me atraen y no se porqué motivo, siento que quiero, como si fueran parte de mi vida.

Estoy feliz, tanta felicidad se escapa de mi cuerpo y comienzo a saltar más alto que nunca las olas, quiero llegar hasta donde está mi familia, para contarles la experiencia vivída, quiero volver a mi mundo, lo extraño, me alejé bastante de mi seres queridos, es que los humanos ejercen tanta curiosidad en mi, que me dejo llevar por mis instintos hacia la orilla para poder verlos. Pero soy un simple delfin y soy feliz por ser como soy y vivir libre en mi hábitat junto a los míos.

Lina

Lagodecristalesazules

18/05/2013

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