Amor incondicional

I

En los rincones del hogar,

donde el sol se posa tímido,

allí reside un amor sin igual,

un lazo que es eterno, limpio.

II

Las mascotas, fieles compañeras

con sus ojos llenos de ternura,

siempre nos dan risas sinceras,

y su amor, sin medida ni censura.

III

El perro, leal guardián y juguetón

nos sigue con pasos apresurados,

su cola es un latido de emoción,

su mirada está llena de encantos.

IV

El gato, misterioso y elegante

se acurruca en nuestro regazo,

sus ronroneos, un canto vibrante,

y su cariño, un abrazo sin ocaso.

V

Los pájaros, con sus tonos melodiosos

nos despiertan al alba con su alegría,

sus alas despliegan sueños hermosos

su libertad nos llena a todos de poesía.

VI

Así, en cada pata, pluma o escama

late un corazón que nos entiende,

un leal amor que si nos trae calma

que, al pasar el tiempo, se extiende.

VII

Porque el amor a las mascotas es puro

sin quejas, prejuicios ni condiciones,

un lazo que se forja en lo más seguro

a todos nos llena de risas y emociones.

VIII

Abracemos a nuestros fieles amigos

con gratitud y admiración sincera,

porque su amor es un regalo divino

luz que ilumina nuestra vida entera.