Dicen mis hermanos y mis padres
que mi casa parece casa de locos
que no conforme con la parlanchinas
de mis dos hijas, encima tengo un
par de cotorros.
Pero creo que a veces exageran
que tanto son cuatro perros,
doce jaulas, una tortuga y una
pecera.
Ni que fuera tanto lío, los vecinos
no se quejan, es verdad que el
trabajo y ajetreo empiezan muy
temprano, entre mandar las niñas
a la escuela y hacer el lonche
del marido, no sé ni a que hora
empiezo con las mascotas y lo mío.
Si atiendo primero a canarios y verdines
protestan lo cotorros, gritándo paco y
pituco voz en cuello -mamá cotorrito
tiene hambre soy yo primero-, si me
tardo en atender a mis perros,empiezan
a ladrar morfi, canela, y aullando kiara
y chapis cierran el concierto.
En fin que todo parece para muchos
muy complejo, pero es cuestión de
organizarme y me alcanza bien el
tiempo, para atender el aseo de mi
casa, un marido, dos hijas y un
zoológico completo. Ah y se me
olvidaba mis rosales y uno que otro
pensamiento.
Mercedes del Pilar Reyna Camacho
31-07-09