Aunque quizÁs

Aunque quizás nunca leas estos versos
quiero que sepas que aun te amo,
no importan las circunstancias grises
que separaron nuestros caminos,
lo único que sé, es que a pesar de todo,
cada segundo que pasa, más te extraño,
como se extraña tu sombra en las
vertientes de los ríos de mi destino,
como se extraña tu alma ceñida en los
tapices de mis recuerdos de antaño,
como se extraña tu sonrisa plasmada
en los restos de mi corazón partido.
Y mientras más te pienso,
más lejos estoy de ti,
cada noche que muere,
en el nacer de cada día,
en el vergel de cada año.
Aunque quizás nunca leas estos versos
quiero que sepas que aun te amo.
Sé, que en alguna parte, en lo más profundo
de tu corazón, aun me recuerdas.
Me llevas dentro de ti, porque si no fuese así,
entonces dejaría de creer en el amor.
Porque tanto sentimiento no se puede
olvidar como se cierra una vieja puerta
y no se puede dejar de amar de verdad,
aunque te desgarre el dolor.
Te seguiré amando aunque en mis manos
tan sólo quede mi esperanza muerta,
y mis labios digan: Te amo,
a otras pieles sólo por pundonor.
Aunque quizás nunca leas estos versos
quiero que sepas que aun te amo.
Lo hago porque cuando se ama
se hace con cada suspiro del alma
y se llenan las alforjas de la vida
con los aromas de la mujer amada;
se ama porque se es libre gritando
tu nombre con las fuerzas de mi garganta
y se pintan los sueños con los colores
reflejados de las luces de cada alborada
y aunque te has ido para siempre
como el viento lúgubre de aquella mañana
te sigo amando, porque aun eres parte de mi vida.
Aunque el resto de mi vida, por amarte a ti, ya no sea nada.