Nuestra calle

Quiero caminar la calle empedrada
por todos los besos…
calzada en veredas que marquen nuestros secretos,
de las casas con paredes como veinte novias, alineadas en un sacramento,
tejadas con el mismo color con que la pasión
me tiñó por dentro.
Los balcones adornados con tantos ramos,
como ramos de hojas en el mundo, se armarían
cuando soplan los vientos, …
colgando de los balcones,
cual si fueran manos de amantes..
saboreando el altar de los sueños.
Entoldada por sabanas, la quiero,
con la textura de caricias prodigadas,
por fuera y por dentro,
las iniciales bordadas por nuestros cuerpos,
impregnadas con perfumes de agotamiento,
en millares de horas de íntimos encuentros.
Tan ancha la deseo, para poder llenarla
con nuestras dos almas, y sus dos cuerpos.
En el medio, plantada.
para saciarnos en “TE QUIERO”
una fuente de agua, pintada con el azul del cielo
para beber gota a gota con las manos,
¡y que chorreen por ellas, en los cuerpos!,
el agua cristalina de deseos.
Allá lejos, muy lejos, al final de esa calle
que anhelo, una gran cinta cruzada,
donde escribiremos la leyenda,
.“ESTO ES AMOR ETERNO”
para cortarla juntos… ¡con nuestros pechos!
Edgardo Ruiz Beldarían
01-10-09