"SEÑOR: SI TU QUISIERAS"
Señor: si Tú quisieras,
Tú que todo lo puedes
y entiendes la razón de mis tormentos,
espero que me quieras
y que siempre te quedes
anegando de paz mis pensamientos.
Yo bien quiero quererte,
deseo estar contigo.
Quiero sentir en mi alma tu presencia
¡Tengo un miedo a perderte...!
de verdad te lo digo.
Mis pecados abruman mi conciencia.
¡Oh manantial sereno,
Verdad, Camino y Vida,
que descendiendo de tus sacros lares,
te hiciste un hombre bueno
para sanar mi herida
y para hacer ligeros mis andares.
¿Cómo hacer, Jesús mío,
que a mi alma Tú quisieras
aprisionar en tu costado abierto?
¿Cómo hacer que el desvío
de cosas pasajeras,
ya no arrastre mi ser hacia lo inicierto?
¡Oh, Ven, Jesús amado!
penetra mis sentidos;
sé la sangre que corra por mis venas.
Si todo me lo has dado
y pese a mis descuidos,
de más y más amor a mi alma llenas.
Déjame acompañarte
y escuchar tus palabras,
más que un testigo quiero ser tu amigo
y que siempre al llamarte,
el corazón Tú me abras
que así a donde Tú vayas yo te sigo.
Soy cual bajel perdido
de la mar en el centro,
sin brújula y sin fe y desorientado.
¡Oh, ven Jesús querido,
de este pobre al encuentro
y déjame posar en tu costado!
Heriberto Bravo Bravo SS.CC (Derechos Reservados)