Como una manzana

Que desesperado cansado y enfermo
cargando en mi el peso de la decepción
sin brújula,triste lleno de silencio
luchando ante todo con este dolor.
Arrastrando el peso de mi soledad
vago hacia los campos húmedos y fríos
tratando de un modo poder olvidar
este gran colapso de temor y hastío.
Vencido me siento abajo de un árbol
y un fruto maduro en mi mano cae
lo tomo sin ganas y empiezo a mirarlo
es una manzana¡que preciosa esta!
Sacudo mi mente y en un desenfado
me acuerdo de cosas que aquí ya no están
ese manjar tiene en su terminado
imagenes tuyas que no volverán.
Su color tan rojo como el de tu boca
su textura es suave igual que tu piel
su cascara brilla como tu hermosura
y su olor es casi tu perfume fiel.
Tan solo al tocarla con este fervor
se antoja morderla por probar su miel
sentir en la boca su dulce sabor
así como un día te pude tener.
Y yo ciego y loco trunque mi futuro
y en tus blancos brazos me quise quedar
paladear tu aliento que sentí tan puro
y eras la certeza de mi realidad.
Me venció la gula,mordí con vehemencia
la fresca y redonda fruta que cayó
y un matiz amargo pinto mi conciencia
porque este deleite poco me duro.
Estaba podrida porque en su interior
algunos gusanos la habían degustado
que contraste,es cierto,esto me paso
pues tu dulce néctar otros lo probaron.
Es verdad,tu estabas llena de mentiras
y en tus bellas frases mi ser columpie
decías que me amabas y me prometías
que nunca en la vida me serias infiel.
El cruel desatino ya me ha despertado
mi confianza plena quedo destruida
seras la manzana que cayó del árbol
por fuera preciosa,por dentro podrida.