~Tus Riquezas~

Hombre poderoso no te lo niego, me impresionas
con tu poder, tu dinero, tu fortuna.
Que no posees cabaña, si no una hermosa casona?,
mas sabes, cariño mío, eso a mí no me enamora...
No soy mujer de dinero, soy mujer de libertades,
de irme a donde me plazca y no de ver guardaespaldas,
soy mujer de pantalones y no tal mujer de faldas
que se oculta de quimeras y se esconde de verdades...
Me gusta sentirme libre, el poder ata a los hombres.
Tú me ofreces un castillo, yo prefiero una cabaña,
donde vivir un Amor, mas de esos que nunca engaña,
donde me sienta ser yo, donde no pierda mi nombre...
El dinero compra deudas y yo prefiero esperanzas,
el poder nunca hace libres, solo construye prisiones,
te hace esclavo de su juego y yo juego a las pasiones
y aunque comprender no puedas, tu dinero no me alcanza...
Como una reina tú dices que me tendrías viviendo,
que solo sería la niña que alegraría tus cielos,
pero es que, cariño mío, eso no es gran consuelo,
no quiero ser niña tuya y perder mis sentimientos...
Ni todo el oro del mundo compraría mi emoción,
pues soy Espíritu Libre al que le encanta volar,
viajar por muchos luceros y ser libre para amar
y sobre todo ser libre para sentir su pasión...
Y ahora apareces tú ofrecièndome un castillo,
dinero, poder y cosas que yo nunca he comprendido.
Y me gustas de verdad, me hubiese ido contigo,
pero yo me siento libre y no me impongo castigos...
Me dices que me lo pierdo, porque mujeres te sobran,
pues bien, cariño mío, disfrutalas cuanto puedas,
a mí eso no me estorba, tu postura no te queda
y tampoco me impresiona, vete con las que te cobran...
Que Yo sigo siendo libre, libre cual paloma errante,
cual gaviota venturosa, cual águila inteligente,
porque no soy como otras, ni me pinto de inocente,
no me aferro de mentiras, mejor me aferro a un amante...
Al que siempre vá conmigo y me regala una flor,
al que su promesa es más que mil castillos de arena,
al que me abriga, me ama y nunca me causa penas,
al que no me dá dinero, pero me dá mucho Amor...