Què no habrè sido yo, sino lo que quisiste,
el giro de la rueda de tu alma,
ese mudo latir de tu pecho que ama,
la senda que pausado recorriste...
Y saciaste la sed de tus deseos,
fuí tu fuente, tu río, fuí tu arena.
Tú fuiste para mí muda condena
y viví prisionera de tus besos...
Fuí tu flor con espinas, mas tambièn fuí tu miel
y en el afán de amarte fuí tu abrigo.
Descubrí la pasión de ser contigo
y aprendí los placeres en tu piel...
Yo aprendí a ser mujer entre tus brazos
y te sentiste hombre entre los míos.
Pero todo el calor lo convertiste en frío,
porque siempre llegaste con retraso...
Hoy tengo un nuevo Amor que me llena la vida,
una hermosa aventura insospechada,
un hombre de verdad me hace sentir amada.
Como ves,lo pasado, no se queda, se olvida...