Encontrar ese momento,
que tu mirada vislumbra,
abrir la puerta,
de tu corazón cautivo,
respirar el aire,
con la sonrisa que acompaña,
al paisaje y a la música,
conservar siempre tu libertad,
a la vez que el amor y la amistad,
leer despacio los colores del dia,
atrapar otra mirada en tu mirada,
encender esa luz que todos,
llevamos en nuestros corazones,
sentir el perfume de la caricia amante,
descubrir que no hay secretos en las flores,
hablarle a la tristeza,
con la mirada de frente,
remontar las aguas turbias de la vida,
empezar a decir siempre,
para no volver a decir nunca,
creer en ti misma,
que llegues al final,
a la escondida playa de tu universo,
y que logres oir tu propio verso,
el que lleva tu vida escondida.
No te garantizo la felicidad,
pero quizás de vez en cuándo,
la encuentres en tu camino.
He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer.No he sido feliz. (Jorge Luis Borges)
Millones de gracias, mi amigo Enrique, por esos ánimos tan necesarios.Reitero, gracias. Y pensar que no la habÃa leÃdo hasta hoy, me produce una sensación rara, sobre todo pq tú sin saberlo, me has dado un toque de atención en mi dura cabecita. Gracias, pq tú sabes lo que estoy pasando, y eso que ignorabas que acababa de salir de urgencias por un nuevo brote. Brote, ja, me lo tomo ya a risa, el que me impulsó a escribir la supina memez de ayer y que, inmediatamente he borrado. De nuevo gracias, me la he imprimido como un tesoro, cada palabra es un regalo en estos momentos y estará siempre, este hermoso detalle en mi corazón. Son pocos los que me quedan, pero de lo mejor. Estaba tan sedada que no he podido ir a renovar el nivel asÃ, que aprovecho desde aquà para comentar a otros compañeros, que si no los comento, ni voto es pq tengo que ir, mañana, si la fuerza me acompaña, ja, ire al banco a abonar el susodicho. Reitero, gracias, pq la enfermedad la llevo dentro, y se llama depresión crónica, complicada con transtorno lÃmite. Pero yo amigo Enrique, no le debo dar penita a nadie,jaja. Desde Barcelona para Granada de mi alma, siempre. Ynaca/Lali