Huyendo de la Vida, hacia la Muerte.

1.
Ya no creo en nada.
Ya de todo dudo.
Sólo de mi Muerte
Estoy ya seguro.
Hacia Ella camino
Huyendo del Mundo,
Mientras me pregunto
A qué habré venido.
¡Ay!, cuando me muera,
¿Querrá Dios decírmelo,
Si Dios existiera? 2.
De lo que estoy más seguro
Es de lo que menos sé.
Sé que me habré de morir,
Mas lo que la Muerte sea
No lo sé.
¡Ay, Dios Mío, de esta Duda,
Sácame,
Que Yo, solo y sin Tu Ayuda,
No saldré.
Y en la Angustia más profunda
Me hundiré. 3.
La Muerte es la Estación
De ese Tren que esperamos
Que nos lleve hasta Dios
A hallar Paz y Descanso,
Tras de una Vida llena
De Lucha y de Trabajo.
El Tiempo se ha parado,
Pero la Eternidad
A andar ya ha comenzado
Para el que se fue ya.
Y la Paz deseada
Con la Muerte ha llegado.
Y eternamente le acompañará. 4.
¡Oh, misteriosa Muerte!
Todos vamos a ti,
Mas de ti nadie vuelve.
Entre Vivos y Muertos
Hay un Puente tendido.
Y todos lo cruzamos
El día que morimos.
Creador Increado:
A Ti me vuelvo y clamo:
Cuando el puente crucemos,
¿Estarás Tú, esperándonos,
Señor, al otro lado?
¿Salimos de Tus Manos
Y a tus Manos volvemos
O en la Nada que fuimos
Nos perderemos?
Si tuvimos Principio,
Un día ya lejano,
¿También Final tendremos
Un día ya cercano?
¿A volver a la Nada,
Que antes de nacer fuimos,
Nacemos condenados?
Creador Increado:
A mis Preguntas,
¿Por qué siempre te callas
Y no respondes nunca?
Yo me niego a creer,
Que el Hombre sólo sea
Un Algo entre dos Nadas.
Una Pasión inútil,
Una estéril Quimera.
Una Vela encendida
Que, tras arder, se apaga,
Dejando sólo un rastro
De Ceniza quemada.
Me niego a compartir
La Angustia del que piensa
Que al morir todo acaba
Y cesa la existencia.
En sólo esta Verdad
Yo creo solamente,
Pues solamente de Ella
Mi Fe me habla y mi Mente asiente:
Venir a irse es la Existencia humana.
Pero a irse con Dios.
No con la Nada. 5.
Lo que llamamos muerte, no es La Muerte:
La Vida con La Muerte no se acaba.
Cambiamos de Morada, simplemente.
Y esa Nueva Morada no es la Nada,
Es la Casa de Dios, que en Ella habita,
Y a habitarla nos llama
Pues quiere con nosotros compartirla. 6.
Algo que acaba en nada
Y de la Nada viene,
Nada tiene de Algo,
Todo tiene de Nada,
Pues las cosas son siempre,
Según acaban.
Mi Fe me dice,
Que si vengo de Dios, no de la Nada,
Yo no vine a morirme.
Y si a morir no vine
Con Dios me volveré, cuando me vaya.
Dios ama lo que crea. No lo mata.
Y para El nos creó
Una clara mañana
En la que aún más que el Sol
Su Amor brillaba. 7.
Mi Fe me dice,
Que el día que me muera,
La Fe que hoy tengo se me hará Certeza
Y entraré en posesión
De la Dicha sin fin
Y de la Paz Eterna. 8.
Convive con la Muerte mientras vivas
Y no la temerás cuando te mueras
Si antes has hecho de Ella
Tu Amiga y Compañera.
Si la Vida de Dios la has recibido
También de Dios recibirás la Muerte.
Le has de estar doblemente agradecido.
Si consideras suerte haber nacido,
¿Por qué morir desgracia consideras
Si ante Dios, Vida y Muerte, son lo mismo:
Dos puntos diferentes de un Camino
Que nos conducen a la misma Meta:
A Dios, del que venimos y al que vamos,
Tras de haber coronado la Carrera. 9.
Dios me va llevando.
Yo llevar me dejo.
Siempre caminando
Camino del Cielo.
Todo habré ganado
Cuando haya llegado.
Penas, Sufrimientos
Aquí habrán quedado.
Y el Salto habré dado
A la Vida Eterna,
Donde sé que Dios
Ya me está esperando. 10.
Morirse por dentro
Y vivir por fuera.
Queriendo morirse
Vivir a la fuerza.
Al que en Dios no crea,
Cuando caiga Enfermo,
Cuando llegue a Viejo,
Tal final le espera.
¡Qué pena de Vida!
¡Qué pena de muerte!
Vivirla o morirla,
¿Le valió la pena? 11.
¡Pobre del que Fe no tiene!
¿Quién le quitará su Angustia
Cuando La Muerte le llegue
Y le atormenten las Dudas?
Vivió de espaldas a Dios.
Al Dios al que ahora se vuelve
Cuando ya todo perdió.
¿Habrá Algo tras de la Muerte?,
Se interroga con terror
Mientras le vive a la Muerte.