Observaba en mi ventana
gotas de lluvia caer,
no me gusta la tristeza
que siento de ver llover.
Las nubes cubren los rayos
que brindan luz y calor,
me siento como perdida,
sin esperanza, ni amor.
La nostalgia que me invade
me cambia de dirección,
como camino sin rumbo,
toda ausencia de emoción.
Hay momentos en la vida
que como viendo llover,
solo lágrimas derramas,
pero también cierto es
que después de una tormenta
la calma, suele volver.
Las lágrimas de mis ojos
me limpian el corazón,
aclaran mis pensamientos,
me devuelven la razón.