Si su permiso me diera, quisiera recorrerla entera, con mis manos su cintura, la cual moldearon perfecta, con mis dedos los lugares en donde sienta el latido, de sus entrañas venidos, bello cuerpo de princesa... Romperías la quietud, de una noche silenciosa, le enseñaría el amor que por tiempo he guardado, mientras mis labios cantando a sus oídos dirían, tantas bellas poesías que mi corazón de hombre, ha escondido muy guardado, en el fondo de mi alma... Recorrería mi patria, llevándola entre mis manos, le enseñaría a los niños el porque la amo tanto, permitiría que muchos, quisieran tener mi suerte, de tenerla entre mis brazos, recorriendo yo su cuerpo... Sin su presencia mi dama, que seria de mi vida, mis días serian tristes, al no tenerla en mi cama, en una reunión de amigos, de familiares vecinos, usted seria la reina, iluminando conciencias, enamorando el alma, de un muchacho trovador... Si fuese rico, Europa, Asia, África, que mas, conocerían lo dulce de sus palabras de hembra, admirarían su cuerpo de figura pronunciada, envidiarían mi suerte, de ser pobre cantador... Dulce hembra de madera, con seis cuerdas que dan vida, a las dulces melodías que sus acordes me dan, bella guitarra afinada, que seria de mi vida, con mi solitaria voz...
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!