Tan grande se ve nuestra casa estando vacía,
sin ti en ella me hallo perdido, nada encuentro.
Es oscuro y opaco lo que antes reluciente lucía.
Mientras no estás, en nuestra habitación no entro.
Vuelve el sol en la mañana sin conciliar el sueño.
Consciente soy que tengo una vida que continuar,
en tu ausencia en todas partes me siento pequeño,
la realidad me está azotando y esta en todo lugar.
Quiero estar ante ti ahora mismo, frente a frente,
deseo decirte todo lo que ante mi boca callaba,
me es tan difícil encontrar razón para perderte.
Alcanzar la meta a nuestros sueños, importaba.
Mucho tiempo ha pasado de nuestra despedida,
añoro la inmensa alegría que me das, tú amor.
Cuantos besos apagados y tantas noches perdidas.
Sin ti, mi destino es azaroso, no tiene ya valor.
Autor: Alcibíades Noceda Medina