Decirte que te amo con pasión
sería hacerle gala a la ironía,
no pudiera ofrecerte lo que un día
alguien me arrebató del corazón.
Quisiera serle fiel a tu emoción,
besarte locamente y con ternura,
abrazarte con fuerza, con dulzura,
y ser de tu jardín la bella flor.
De un zarpazo dejaron mi existencia
con amargura y cruel melancolía,
desconozco la risa y la alegría.
Se ha quedado desnuda mi conciencia.
Decirte que te amo con la esencia
del amor que no existe, no lo haría.
No quiero lastimarte, no podría,
El amor no se nutre de apariencia.