Servir solo para robar

Mi dulce Patria querida
como me puedo de ti aprovechar
si llevo tu sangre ahora en mis venas
como te puedo dejar hoy de amar
Quiero seguir luchando en mi Patria
y darle a mis hijos con gran humidad
todo aquel fruto que a diario me gano
sudando mi cuerpo con gran dignidad
voy a ponerle a mis hijos la cara
donde le pueda al sol enseñar
que las arrugas que llevo en la frente
son las que hablan en sí la verdad
Nunca he tocado lo ajeno en mi vida
y tengo en mi cuerpo ahora un altar
por eso yo vivo pendiente en mi tierra
de aquellos que solo nos saben robar