"¿Decirte adiós...?
¿Decirte adiós? ¡JAMAS! A ti me aferro
con las manos, las uñas y los dientes.
Lanzo garfios de amor a tus pendientes
y viendo tus abismos no me aterro.
Puedes pisar mis dedos, empujarme,
zafarme de tus blandos asideros;
puedes herirme, amor, puedes matarme,
azotarme con látigos arteros.
Ríete, en fin, de mí, de mi inocencia,
búrlate de mis versos y mis sueños.
Llámame ingenuo y loco y terco y necio,
trátame con enfado y displiscencia
que yo habré de seguir con mis empeños
de amarte más y más y más y recio.
Heriberto Bravo Bravo SS.CC (derechos reservados)