escucho los gemidos, en los tantos hondos lamentos. A travès del mundo, y detràs de esos alientos, salpica sus ecos,a los pechos desnudos. en cada vida,como hilos de vientos. Y todo nace. bajo aquel llanto. ¡Las cavernas de la aurora agita! buscando el blanco manto, Un coro de Paz! en el cielo y tierra donde habita. la semilla se debilita. Mientràs tanto Aquellos. Al màs buitre de los hambrientos, en su carne suscitan! el odio y la maldad que nos irritan. un millon de voces! gritan y caminan. Al oido del poeta,la esperanza ajena. en vuelo se avecina. Por las tantas almas nuestras y colombinas, A esas dos patrias hermanas! que el odio y la envidia, bañan nuestras fronteras vecinas. SOL.