No queda nada ya, de tu presencia,
no queda nada ya, del alma mía,
ye has ido y solo soy melancolía,
se ha extinto ya la luz de mi eixstencia.
Tomaste mi existencia infortunada,
reviviendo la ilusión que se moría,
extinguiste con tus besos mi agonía,
me sacaste de las sombras, de la nada.
Más, ahora que te has ido vida mía,
se ha marchado de mis ojos la ilusión,
la ilusión que había en mis ojos al tenerte
Porque se que no me engaña el corazón,
¡adiós amor, quien me quisiera un día!
¡adiós amor, no he de volver a verte! 26 de Agosto de 1998 a Wendy