Ya no queda nada,
Ya no me queda nada…
Soy un fantasma que te quiere,
Soy un fantasma que te quiere,
Te espero día a día,
Transito la antesala del amor que no puede ser verdad,
Salgo al camino para que algún día me quieras,
Poder recibir las migajas de ese amor,
Amor que danza en el aire al alcance de otros también.
Yo soy ese fantasma que te habla al oído,
aquel fantasma que te promete su propia vida,
Todo por sentir el calor de ese beso,
Beso que no es sólo mío, Beso que es de Leviatán.
Te he dejado partir…
Cada vez que haces estallar mi corazón,
Una y otra vez…
Una y otra vez sintiendo la abstinencia de ti,
pero… sin remedio a esta hambre,
vuelvo a tu falda ,
pidiendo que me tomes,
declarando mi amor,
reconociendo que te necesito,
sin ti no puedo continuar…